Una pequeña descripción

El grupo de Espeleologia de Getafe se creo en el año 1989. Desde entonces seguimos reuniéndonos en un local del ayuntamiento situado en la C/Titulcia nº 12 bajo, todos los miércoles a partir de las 21:00 horas, te esperamos, ya que aún nos queda cuerda para rato.

sábado, 13 de julio de 2019

DESCENSO DEL BARRANCO ESTRIBIELLA
PIRINERO CENTRAL ARAGONÉS
SIRESA (Huesca)

Los barranquistas al completo

JORNADA DE BARRANCOS  13 de Julio de 2019 
ACTIVIDAD: BARRANCO ESTRIBIELLA  
LUGAR: Siresa, Huesca (Pirineo Central Aragonés) 
PARTICIPANTES: MARIO, MONICA Y CARLOS 

Descripción General 
El Barranco Estribiella es un espectacular descenso de dificultad media repleto de cascadas donde podremos rápelar, saltar o deslizarnos por toboganes de variados tamaños, a todo ello nos rodea un paisaje inigualable como es la Selva de Oza. Camino de acceso cómodo y retorno prácticamente inmediato. 
Periodo de descenso: Verano – Otoño  Dificultad del descenso: V4 A3 III (media) Población: Valle de Hecho
Acceso: https://es.wikiloc.com/rutas-descenso-de-barrancos/barranco-estribiella13962928 
Horario de aproximación: 1h 15min                                                                                              Horario de descenso: 4h (2h 30min la parte vertical, 1h 30min la parte boscosa final) Horario de Retorno: 20 min o inmediato                                                                      
Longitud: 1.500 mts              
Desnivel: 250 mts                                    
Material: una cuerda de 60 mts, una cuerda de 45 mts y una cuerda de 40 mts.  
     
Breve Descripción de la actividad:

El viernes día 12 de julio, nos juntamos Mario, Carlos y yo sobre las 17.30 de la tarde para encaminarnos de nuevo a Pirineos.  
Tras un empiezo de temporada tardío queríamos un poquito de agua fresca, así que nos dirigimos dirección al Valle de Hecho.  

Nuestra intención, hacer noche en el refugio lo más cerca del comienzo de la aproximación, y poder empezar a caminar temprano evitando de ésta forma el sol, que la predicción meteorológica, nos daba para el día siguiente.  
Tras varias horas de camino, llegamos anocheciendo al Puente de la Reina donde  tomamos la carretera que sube al Valle Hecho. Al llegar al pueblo continuamos hacia la Selva de Oza hasta encontrar el puente nuestro barranco y la subida a Peña Forca.  

Allí aparcamos la furgo de Mario, cenamos, y nos fuimos a descansar.  
A las 7.30 tocaba el despertador, un día espectacular amanecía, y contentos preparamos todo el material. Antes de las 8.30 nos hacíamos la foto de rigor, y comenzamos con el ascenso.  
La aproximación comienza en una campa que se encuentra llena de furgonetas, y hay un cartel indicador que señala la subida a Peña Forca y al barranco.  
Ascendemos por el sendero, al comienzo separado del río, y poco a poco nos acercamos a él y podemos ver alguno de los puntos del descenso. Por suerte la sombra de los árboles nos acompaña, pues vamos salvando desnivel constantemente y el calor aprieta aunque todavía no son las 9 de la mañana. 
En 45 minutos salimos del bosque para coronar en una bonita pradera y observar que todavía hay neveros que auguran un agua bien fresquita en esta ocasión. Las vistas son fantástica, y sólo para estar allí merece la pena el esfuerzo. 
Avanzamos unos metros por la pradera hasta encontrar un buen sitio para bajar hasta el cauce. Nos enfundamos los trajes y confirmamos que hoy no vienen nada mal los guantes para no pasar frío.  
Rápidamente estamos en el primer rápel, de 25 metros, y a la mitad descubres la contundencia del agua cuando se precipita irremediablemente sobre tu cara. Sin duda un gran comienzo para este barranco. 
Ya calados hasta los huesos un segundo y tranquilo rápel de 9 metros no supone ningún problema. La reunión está sobre un bloque que hace que bajes en volado un par de metros hasta las ahora tranquilas aguas del Estribiella. 

Continuamos con un destrepe que tiene una cuerda instalada, como algunos otros pequeños rápeles del segundo tramo. También un rápel de 3, es una pena que las pozas no sean profundas para hacer algún salto. 
Llegamos al tobogán de 5 metros, tan perfectamente pulido que parece de un aguapark.  
Ahora es el turno de un rápel de 17 que posiblemente se podría hacer un trozo como tobogán dejando la cuerda un par de metritos antes de la poza, aunque con cuidadito. Es una bonita cascada que da gusto  bajarla a toda velocidad rapelando con el culo. 

Pasado el supertobogán, llegamos a un pequeño rápel marcado como punto conflictivo en los croquis en caso de encontrarnos con un caudal alto. Es normal, pues se estrecha muchísimo y es un resalte con una profunda poza intermedia, estrecha pero peligrosa, si te cae una gran cantidad de agua encima de ti.  
Tras ello llegamos al punto clave del descenso, que son 2 cascadas de 20 y 30 metros separadas por un pequeño resalte de 2 metros. 
La primera de ellas la vimos desde la aproximación, pues se pasa justo al lado. Se comienza el rápel desde un espectacular balcón al Valle de Echo, teniendo una primera parte de tobogán, que luego da paso a una vertical lanzando el agua sobre nosotros y dando lugar a una espectacular y estética bajada. 

 Para acceder al siguiente rápel, bajamos a una poza con un bloque y llegamos a la siguiente reunión. Ahora nos espera una gran cascada en la que el agua parte de una poza central extendiéndose hacia los lados sobre una enorme pared. Si intentamos bajar con los pies esta cascada, casi seguro que terminaremos con algún moratón en rodillas, codos o cualquier otra parte del cuerpo, porque al igual que el resto del barranco, resbala una barbaridad. 

Ahora nos espera una sorpresa con la que no contábamos. Tenemos un rápel de 20 y otro de 12 juntitos. Se supone que había una reunión intermedia,  pero no la encontramos por ningún lado. En éste punto, la cuerda de 40 que habíamos montado para el primer rápel, no nos llegaba por los pelos para encadenar los 2 rápeles, por lo que una vez alargada para bajar el primer y el segundo, empalmamos con otra, para que Mario bajara hasta el final y poder recuperar las dos cuerdas.  
También, se suponía que había equipado un pasamanos con cuerdas viejas para evitar estos 2 rápeles, pero está instalación, tampoco la encontramos.
  
Ya sólo nos queda una cascada para terminar el primer tramo del descenso. Se trata de 18 metros de caída con una repisa intermedia que concentra casi toda el agua en un embudo. Podemos bajar por la parte izquierda para tener un poco de tranquilidad o inmolarnos por el embudo y pegarnos una buena ducha, pues el agua golpea fuerte en ese punto.  Es recomendable sacar la cuerda del embudo y llevarla a la parte de fuera si queremos que los siguientes puedan tener un descenso más tranquilito, o terminarán casi seguro en medio del chorro. 
Una vez aquí, hay que bajar un resalte hasta ver los hitos que marcan la subida al camino de aproximación y en 20 minutos llegar a los vehículos. Nosotros decidimos no hacer  la segunda parte, que tiene 4 rápeles desde árboles y muuuchos metros de río que recorrer y muchos patinazos que sufrir por el camino. 

Esta segunda parte es recomendable solamente si nos hemos quedado con muchas ganas de más, pues después de un primer tramo tan fantástico, desmerece un poco el conjunto. Hay que saber cuándo retirarse con gloria, así que, nos quitamos los neoprenos, comimos algo, y nos encaminamos tranquilamente por el camino de vuelta al coche al que llegamos sobre la 13.00.  

No hay comentarios:

Publicar un comentario