Antes de comenzar me gustaría recordarle a todo lector interesado en el mundo subterráneo que lo que ahora está viendo, en este preciso instante, es lo que la naturaleza tardó millones de años en moldear.

Si entramos grupos numerosos, en cavidades pequeñas, podemos dañar el medio ambiente, por lo que las expediciones deben ser en grupos reducidos. De esta manera será mucho más sencillo respetar los espeleotemas (estalactitas, estalagmitas…), las cuales no deben ser reubicadas en su marco natural, ¡¡¡ten cuidadito y no las rompas!!! Y si tienes la suerte de visitar una cavidad con pinturas, restos paleontológicos o restos arqueológicos, no los tocaremos ya que se dañarían y los próximos visitantes no podrían disfrutar de ello.

Esto no debería ni decirlo, pero allá va! Por si acaso…no debemos arrojar animales, rocas, arbustos o basura y cuando entremos no debemos dejar en el interior pilas, plásticos, restos de comida…y así como lo que no estaba allí no debe quedarse, lo que, si estaba allí, la fauna, y la flora propia del ecosistema, debe quedarse en su interior, para no alterar el equilibrio biológico de la cavidad, muchas veces tan delicado como peculiar.

SIMPLEMENTE RESPETANDO LAS MARAVILLAS QUE TE OFRECE EL MUNDO SUBTERRANEO, APORTARÁS TU GRANITO DE ARENA!!

CONSERVA LA NATURALEZA!!

(texto basado en cartel informativo de “vocalía de conservación de cavitats i barrancs”de la federació territorial valenciana d espeleología)

2. Intendencia

2.1. Equípo personal

La cueva de la carrera no es una cavidad muy fría por lo que, con el mono exterior, una camiseta térmica y un pantalón térmico tendremos suficiente.

Se requiere equipo de progresión vertical.

El suelo no tiene grandes charcos por lo que el calzado se deja a gusto del consumidor! Evitar los tacones de aguja y las chanclas!!!

2.2. Equípo colectivo

- Saca con botiquín

- Equipo de burilar

- Cuerdas de 25m+20m+30m

- 15 mosquetones

- 15 chapas

3. Mapas

3.1. Ubicación

LA Cueva se ubica cerca de Arredondo (Cantabria), en una pequeña localidad llamada Socueva. Esta zona ofrece una gran oferta de albergues, hostales… aunque si por casualidad el tiempo lo permite la mejor opción siempre es dormir al raso!!

Para dejar los vehículos… nosotros partimos de Arredondo por lo que una vez cogimos la Carretera de Socueva, antes de llegar al pueblo, como a 2 km tras tomar el desvío, se ve una casa de Piedra y después veremos al borde derecho de la carretera un pequeño espacio donde pueden entrar tres o cuatro coches como máximo. Es allí donde aparcaremos y cogeremos los equipos para iniciar la aproximación!

3.2. Aproximación

La aproximación a la Cueva de la Carrera, comienza bajando por la Carretera que hemos subido con los coches, poco después de pasar la casa de Piedra veremos un sendero que sale a mano izquierda, y lo seguiremos buscando los hitos y algunas marcas azules como buenamente podamos, y siempre eligiendo los de la izquierda, para permanecer lo más cerca de la pared rocosa, El camino no está muy bien señalizado por lo que perderlo no es raro. Nosotros lo perdimos y tardamos como 1,30h en alcanzar la boca de la Cueva.

En cualquier caso, si seguimos hacia la izquierda, pegados a la pared rocosa llegaremos a una “pradera “que nos hace de antesala de la Cueva.

Una vez en la entrada, hacemos un descanso para recuperarnos de los 500 m de desnivel que nos hemos marcado y aprovechamos para disfrutar mientras nos equipamos de unas vistas excepcionales del pueblo de Arredondo que en unas horas nos volverá a recibir.

4. Progresión y desarrollo

Una vez en la entrada, identificada con el número 1850 en rojo, podemos apreciar una corriente de aire frio que sale del interior de la gatera (unos 4…5m), que nos da la bienvenida. Lo siguiente que nos encontramos es un laminado bastante amplio, pero no muy alto, por el que pasaremos arrastrándonos o en cuclillas en la parte final. Tras esto vemos un sendero balizado; desde que en el 2007 está cueva fuera descubierta por un equipo francés, son muchos las asociaciones que han colaborado en su inspección y documentación, y muchos los que la visitarán, por lo que esta medida de seguridad para conservar el entorno es un detalle que nos guiará en gran parte del recorrido.

Seguimos el camino balizado, y sin haber avanzado mucho ya podemos apreciar en las paredes extrañas siluetas rudistas lo que nos indica que en pasado estas cavidades estuvieron llenas de agua. Y una vez más, siguiendo el camino balizado avanzamos hasta llegar a una sala en la que se bifurca el camino. En este punto se decide dividir la legión de “espeleólogos” que nos hemos juntado, en dos grupos, los que ya habían visitado previamente la cavidad que prosiguen hacia adelante y los que antes de seguir recorremos el camino que sale a mano derecha, para posteriormente regresar a este mismo punto y continuar con el equipo.

En la bifurcación de la izquierda encontramos muchas curiosidades a lo largo del recorrido, empezando por crestas rojizas formadas por oxido ferroso*, graciosas estalagmitas, incluso columnas a punto de formarse… las paredes decoradas con fósiles de que en varios puntos se ven marcadas con zarpazos de los antiguos osos cavernarios, las oseras y los restos fósiles de los mismos hacen de este desvío un viaje de la imaginación. Finalmente llegamos a un laminado amplio con una pequeña sala en la que no se puede continuar, es el punto de retornar a la bifurcación.

Volviendo a la sala donde se dividían los caminos seguimos hacia adelante por el camino balizado, bastante cómodo, hasta llegar a un desnivel en el que nos encontramos un pasamanos, para montarlo se ha instalado un par de splits con una cuerda de 25m desde una roca plana que encontramos a mano derecha hasta el inicio del pozo. Seguido encontramos una rampa muy resbaladiza empinada en el primer tramo, pero con menos pendiente al final. Para bajar, en la cabecera con un 8 de doble gaza y un par de mosquetones enganchamos los anclamos los 20 m de cuerda que nos dejarán en una zona segura previa a la bajada al nivel inferior. Un poco ms adelante, cuesta abajo a mano izquierda, pasando debajo de una roca encontramos la cabecera de la tercera cuerda avanzamos por zona segura hasta la siguiente chapa y ahí pasamos unos 4 metros de pasamanos que dan a una bajada de unos 12 m los últimos 8 volaos. Tras esto ya en el nivel inferior y en zona segura decidimos comer algo rápidamente y continuar.

Llegados a este punto de otra vez hay dos opciones, por lo que de nuevo nos dividimos, los repetidores tiran para abajo y los nuevos tomamos el camino de la izquierda para más tarde continuar hacia abajo con el resto del equipo.

La bifurcación de la izquierda es un pequeño museo de flores de amplias salas marcadas por el kaos de bloques, y guiada por las balizas hasta la mitad del recorrido, una vez que se termina el camino marcado, el avance es un poco más físico y se realiza sin problema siguiendo los hitos, pero merece la pena llegar al rio de cal, punto final del recorrido. Una vez allí volveremos al punto donde nos dejó el ultimo rapel para continuar a mano derecha.

Llegados a este punto, la mitad del equipo decide volver a la superficie tras salvar el volao y el cambio al pasamanos del primer tramo el camino de vuelta trascurre sin problema ni sorpresa mientras nuestros compañeros continúan hasta el volcán de sílice.

La vuelta se hace un poco resbaladiza debido al terreno empinado y a las lluvias leves que han caído mientras estamos dentro, por lo que se recomienda tener cuidado. En poco más de 40 min estamos en los coches dispuestos a cambiarnos y abrir una cervecita merecida!!!